Novedades - Museo de los Niños de Caracas
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Novedades

El año comienza y el Museo de los Niños continúa con la tristeza de no poder recibir visitantes ya que la presencia de la pandemia impide que se cumpla su norma que establece “Prohibido no tocar”. Ante esta situación, y ante la necesidad de llegar a los niños para transmitirles conocimientos y reforzar valores, se ha recurrido a las herramientas de comunicación que permite la tecnología.

En el Museo de los Niños seguimos apoyando la educación, ahora a través de los medios tecnológicos de comunicación. LOS CURIOSOS, los amigos de Museíto que forman una “pandilla” de niños entre seis y doce años, además de jugar -como todos los niños de su edad- están interesados en descubrir el por qué de las cosas. Muchas veces son los más pequeños los que se preguntan algo y los más grandes los ayudan a entenderlas. Así, en las primeras “investigaciones” que hemos enviado a nuestros amigos virtuales, Omar pregunta por qué tiene que lavarse las manos con jabón, si solo con agua basta y Sara le explica la razón para hacerlo. Esas y muchas otras cosas los llevan a hacer sus propias indagaciones para obtener  respuestas.

El “Rincón de los Cuentos” del Museo de los Niños de Caracas es un lugar encantador donde –rodeados de ilustraciones y modelos relacionados con personajes de fantasía– se deja volar la imaginación y se leen cuentos cuyo contenido los niños analizan y discuten, encontrando en ellos enseñanzas útiles para su vida en sociedad. Así, al tiempo  que se les proporciona un rato de ilusión y de alegría a los niños, estimula en ellos el interés por la  lectura, les ayuda a ampliar su comprensión del texto, a aumentar su vocabulario y a descubrir el inmenso universo encerrado en los libros.

La pandemia, como es de todos conocido, nos impide recibir visitantes pero no nos impide seguir contribuyendo con la educación de los niños del país, y hemos recurrido a diversos medios de comunicación digital para seguir cumpliendo nuestra misión de ayudar a los niños a aprender mediante el juego. Una de esas actividades es la realizada desde “El Rincón de los Cuentos” que, como les informamos anteriormente, se lleva a cabo todos los lunes: se lee un cuento, con una moraleja que refuerza los valores de la sociedad, y luego los niños expresan sus opiniones en el grupo de WhatsApp. Más tarde, muchos de esos comentarios son leídos en nuestra cuenta de Twitter, llegando a muchas otras familias. Los cuentos se encuentran en nuestro canal de YouTube, Museito Caracas, a fin de que quienes deseen volverlos a oír lo puedan hacer. Además, progresivamente, se los vamos a hacer llegar en esta nuestra página web; en una publicación anterior les presentamos los diez primeros cuentos leídos y pronto les haremos llegar otros. Ahora, queremos presentarles una nueva actividad: se trata de LOS CURIOSOS, realizada por Museíto y un grupo de amigos –que ellos llaman su “pandilla”– que tienen entre seis y doce años y están interesados en descubrir algunos aspectos relacionados con la ciencia, por ejemplo: ¿Cómo se forma un arcoíris? O ¿Cómo respiran las plantas? Para encontrar las respuestas, ellos hacen “investigaciones” en el campo y también en los libros, y se las trasmiten a todos sus amigos “virtuales”.

La pandemia no nos permite recibir visitas en el Museo de los Niños, por eso -en estos difíciles momentos- hemos recurrido a diversos recursos de comunicación digital para seguir cumpliendo nuestra misión de ayudar a los niños a aprender mediante el juego Una actividad que ha tenido gran receptividad es la realizada en “El Rincón de los Cuentos”: los lunes de cada semana los amigos del museo nos encontramos virtualmente, escuchamos la lectura de un cuento -que  siempre incluye una moraleja sobre valores-, e intercambiamos ideas sobre el contenido del relato.

“Venezuela es un país maravilloso, donde tuve la suerte de nacer. Es la razón de mi trabajo contribuyendo con la educación de los niños”

Por Carolina Jaimes Branger @cjaimesb Es brillante, es encantadora, es laboriosa. De una humildad ejemplar. Cuando su papá, Rafael Caldera, fue presidente de la república, se escapaba de los guardaespaldas que le habían asignado para ir a comer con sus compañeros de la UCAB en un restaurante de San Martín. Su labor como profesora universitaria dejó huella en quienes han sido sus alumnos, quienes ven en ella un ejemplo a seguir en todo sentido. Como socióloga tiene una vasta obra donde analiza y propone soluciones para ese mal que nos aqueja, como lo es el subdesarrollo. Trabajó con su madre, doña Alicia Pietri de Caldera, tanto en la Fundación del Niño como en el programa “Un cariño para mi ciudad”. Y ha mantenido –contra viento y marea– su obra cumbre, el Museo de los Niños de Caracas, que, a pesar de todo lo que nos ha tocado vivir, sigue siendo uno de los mejores del mundo, un lugar donde los niños –y los adultos– aprenden jugando.

¡Hola! Soy Museíto, el amigo con quien —desde hace treinta y nueve años— han compartido experiencias y actividades para aprender jugando en el Museo de los Niños de Caracas. En estos treinta y nueve años son muchos los que han disfrutado conmigo de todo lo que tenemos en el Museo para descubrir el mundo de la ciencia y la tecnología, y reforzar los valores fundamentales de la sociedad.

El Museo de los Niños de Caracas tiene la obligación de cumplir su misión de apoyar la educación en nuestra sociedad y -ante la imposibilidad de recibir visitantes-, ha recurrido a las tecnologías de comunicación para llegar a los niños, a sus docentes y a sus padres, colaborando con la importante tarea de enseñar y transmitir conocimientos.